Por qué especialmente las personas mayores de 65 años se benefician del ayuno intermitente

A medida que envejecemos, nuestro cuerpo cambia. Por ejemplo, perdemos masa muscular, nuestro sistema inmunológico y cardiovascular se debilitan, la función pulmonar empeora, nuestras habilidades cognitivas disminuyen y nuestro metabolismo se ralentiza.

En resumen: a medida que envejecemos, nuestro cuerpo necesita más atención. Una de las maneras más simples y eficaces de contrarrestar los procesos de envejecimiento relacionados con la edad es el ayuno intermitente, un enfoque en el que la ingesta de calorías se restringe durante un período determinado.

Muchos estudios científicos sugieren que el ayuno intermitente influye significativamente en nuestra salud mental y física. Las pausas regulares entre comidas reducen la carga para el cuerpo y lo hacen más resistente a las enfermedades. Los períodos de ayuno regulares también fomentan un ritmo biológico saludable. Durante el ayuno, el cuerpo toma un descanso digestivo y ahorra energía que puede utilizar para reajustar el reloj interno del cuerpo.

Aquí hay una lista de los principales beneficios del ayuno para los ancianos:

1. Mejora del control del peso

Con el avance de la edad, el metabolismo se ralentiza, lo que dificulta el control del peso. El ayuno intermitente puede ayudar a los ancianos a perder peso al reducir la ingesta de calorías y aumentar la quema de grasa.

2. Mejora de la función cerebral y el rendimiento cognitivo

Los estudios han demostrado que el ayuno intermitente mejora las funciones cognitivas. Las personas mayores pueden así reducir su riesgo de enfermedades como demencia y Alzheimer y ralentizar el deterioro mental relacionado con la edad.

3. Mejora de la sensibilidad a la insulina y control de los niveles de azúcar en la sangre

El ayuno intermitente puede ayudar a regular los niveles de azúcar en la sangre, lo que es especialmente importante para los ancianos que tienen un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.

4. Reducción de la inflamación

Las investigaciones han demostrado que las pausas regulares entre comidas reducen la inflamación en el cuerpo. Esto es especialmente beneficioso para los ancianos, ya que tienen un mayor riesgo de dolores crónicos o enfermedades relacionadas con la inflamación.

5. Mejora de la salud cardiovascular

El ayuno intermitente fortalece la salud del corazón al reducir la presión arterial, los niveles de colesterol LDL y los valores de triglicéridos (un tipo de grasa en la sangre).

6. Mejora de la salud intestinal y la digestión

El ayuno ayuda a estimular la musculatura en el tracto digestivo, lo que lleva a una mayor actividad intestinal y a una eliminación más eficiente de desechos. Además, mejora la diversidad y el equilibrio del microbioma intestinal, lo que reduce el riesgo de trastornos digestivos.

7. Aumento de energía, vitalidad y longevidad

Las pausas regulares entre comidas han demostrado aumentar la producción de hormonas de crecimiento, que son importantes para mantener la masa muscular, la densidad ósea y la esperanza de vida. Además, el ayuno apoya la autofagia (el proceso de reparación celular de nuestro cuerpo). Ambos son cruciales para nuestro nivel de energía y nuestra vitalidad.

La mejor estrategia de ayuno para los ancianos

Como muestra la lista de beneficios, el ayuno puede ser una herramienta eficaz para promover la salud en la vejez. No obstante, es importante elegir un método de ayuno que sea seguro y se adapte a las necesidades personales.

Aquí están los mejores consejos de ayuno para personas mayores de 65 años:

1. Habla primero con tu médico

Antes de comenzar tu programa de ayuno, debes consultar a tu médico. Solo él/ella conoce tu historial médico y puede decidir si, y en qué medida, el ayuno intermitente es adecuado para ti. Ten en cuenta que el ayuno intermitente no es adecuado para ancianos con ciertas enfermedades preexistentes, como el bajo peso o enfermedades crónicas. Por lo tanto, consulta primero a tu médico de cabecera.

2. Empieza despacio y ten paciencia

Si comienzas con el ayuno intermitente, es importante que lo hagas de manera gradual y le des a tu cuerpo tiempo para adaptarse. Por eso, los planes de ayuno más simples (con períodos de ayuno cortos) como el 14-10 son los más adecuados.

Si notas que tu cuerpo aún no se adapta bien a esto, también puedes comenzar con un 12-12 y luego aumentar lentamente la duración de tus períodos de ayuno. O puedes continuar con el 14-10, pero hacerlo solo un día sí y otro no en lugar de hacerlo a diario.

También es importante que no esperes resultados inmediatos de la noche a la mañana cuando comienzas con el ayuno intermitente, especialmente si tu objetivo es perder peso. Como se mencionó anteriormente, el envejecimiento afecta negativamente nuestro metabolismo. Por lo tanto, puede tardar un tiempo en ver los primeros resultados, pero la paciencia y la perseverancia darán sus frutos al final.

3. Encuentra tu ritmo de ayuno

En la aplicación BodyFast, puedes elegir entre muchas formas diferentes de ayuno intermitente, desde períodos de 12 hasta 72 horas, ¡y así encontrar el plan perfecto para ti! Además, puedes ajustar tu plan a tu rutina diaria en cualquier momento si es necesario.

Alternativamente, también puedes dejar que el coach elabore un plan para ti, adaptado a tus objetivos y estilo de vida, o elegir uno de los efectivos programas semanales que están disponibles para los usuarios del coach.

4. Bebe suficiente agua

Una adecuada ingesta de líquidos es importante para nuestra salud en general. Esto es especialmente cierto para los ancianos que practican el ayuno intermitente. Asegúrate de beber suficiente agua durante todo el día para mantener hidratado tu cuerpo.

La aplicación BodyFast te ayuda a alcanzar tu objetivo diario de ingesta de líquidos enviándote recordatorios y permitiéndote registrar tu cantidad de bebida.

5. Distráete durante tus períodos de ayuno

Los períodos de ayuno pueden ser un desafío al principio, especialmente si el ayuno intermitente es nuevo para ti y estás acostumbrado a picar durante el día. Para evitar la sensación de hambre o distraerte de ella, ocúpate en actividades como leer, caminar o planificar una reunión con amigos.

6. Come alimentos nutritivos durante los períodos de comida

Cuando rompas tu ayuno, es importante comer alimentos nutritivos que proporcionen la energía y micronutrientes que tu cuerpo necesita. Concéntrate en reponer tus reservas de nutrientes comiendo alimentos integrales como frutas, verduras, proteínas y grasas saludables. La mejor estrategia para romper el ayuno la encuentras aquí.

En algunos casos, los suplementos también pueden ser una opción razonable, ya que a medida que envejecemos se vuelve más difícil para nuestro cuerpo absorber nutrientes de los alimentos. Sin embargo, para tomar una buena decisión aquí, se necesita una prueba de sangre médica.

7. Escucha a tu cuerpo

Si te sientes mal durante el ayuno intermitente o notas efectos secundarios negativos, es importante que escuches a tu cuerpo y ajustes tu rutina en consecuencia. No te presiones demasiado y prioriza tu salud y bienestar.

Ayuno intermitente: tu secreto para una salud duradera

El ayuno intermitente puede ser una herramienta eficaz para que las personas mayores mejoren su bienestar general y se mantengan saludables a largo plazo. El ayuno aumenta nuestro nivel de energía diario, mejora el estado de ánimo y, por lo tanto, eleva nuestra vitalidad y calidad de vida a un nivel completamente nuevo: ¡día tras día hasta la vejez!

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