En principio, cualquier adulto puede ayunar. A excepción de las mujeres embarazadas o en período de lactancia, ya que su cuerpo tiene necesidades específicas durante estos períodos.
Los siguientes grupos de personas deben consultar a su médico si el ayuno intermitente es adecuado para ellos:
- los enfermos crónicos (como la diabetes tipo 1 y 2; enfermedades del hígado, riñón o corazón, gota, etc.)
- las personas dependientes de medicación regular
- personas que padecen o han padecido desórdenes alimenticios y personas de bajo peso